DESALIENTO
Lloran las horas
presas por el desaliento;
triste viajero aposentado en nuestro camino de piedras.
Lleva corbata gris
y su mirada, confusa,
divaga, perdida en significados carentes de luz.
Imperecedero,
acucia por las esquinas,
irrumpe en el pensamiento,
araña la sonrisa,
abraza el miedo,
desnuda las heridas,
apaga el fuego cuando el frío llama a la puerta.
LLoran las horas
presas por el desaliento...
ResponderEliminar“Lloran la horas presas por el desaliento”…
Con ese pensamiento, Fina,
desnudas la pisada que te asiste
y acaso sin pretenderlo rompes el negativo silencio…
Un abrazo
Tu mirada personal del poema me encanta, Dionísio. Acaso sea una forma de romper esa negatividad...sí...
EliminarUn abrazo y lindo domingo para ti
Fina
Ayy!, querida Fina; las horas del desaliento siempre llaman a la puerta de cada persona en una u otra ocasión y nos des`pojen de fuerzas y alegrías, pero, no lo olvidesd, siempre vuelve a salir eol sol. Bello y hondo poema, amiga. Un abrazo y buen fin de semana.
ResponderEliminarEs cierto, querida María, a menudo sucede que este viajero desagradables , "el desaliento2,nos visita, así que, cerrarle la puerta es nuestra mejor forma de actuar.
EliminarGracias por tu aporte tan enriquecedor y un agradable domingo para ti
Fina
Son esas horas y momentos que se hacen interminables...
ResponderEliminarUn abrazo y feliz fin de semana.
...y tanto que se hace intermiables esos momentos, menos mal que no son duraderos...
EliminarLIndo domingo y un abrazo, Rafael
Fina
El tiempo desconsolado por lo que hay. De una magia muy surrealista. Así lo veo yo. No sé su fue por allí tu intención al crearlo.
ResponderEliminarUn abrazo muy grande, querida Fina.
Me parece muy apropiado tu punto de vista, Sara, aunque la intención del poema se refiera a ese desaliento que afecta a las personas, pero..si analizo el principio del poema: LLORAN LAS HORA PRESAS POR EL DESALIENTO", puede dar pie, efectivamente, a esa otra lectura , es decir, horas que lloran y se desalientan por todo lo que alrededor sucede.
EliminarGracia, pues, por enriquecer mi texto con tu lectura, querida Sara.
Un abrazo y lindo domingo para ti
Fina
Con peso de gravedad inamovible el desaliento lo mina todo. Largos son los segundos sin salida en una espesura negra que nos hace frágiles. Lo he vivido en varias ocasiones. Uno se desespera esperando lo mejor y vuelves a caer por cosas de esta vida...
ResponderEliminarYo creo que todos, en algún momento de nuestras vidas, hemos vivido esos momentos de desaliento, y si alguien tiene la suerte de no conocer a ese viajero incómodo, bien por él.
EliminarUn abrazo, Buscador, y lindo domingo
Fina
Esas horas que se hacen eternas, me gusta esa metáfora de lloran las horas, preciosa, y profundo poema.
ResponderEliminarUn placer venir a tu espacio a leerte.
Que disfrutes el fin de semana.
Un abrazo.
Y un placer para mí, tus comentarios, querida Carmen. Me alegra que te gustase el poema
EliminarUn abrazo y feliz domingo para ti
Fina
Precioso Fina, intenso ese desaliento, profundo y expresado con unas metáforas muy bonitas.
ResponderEliminarEspero que solo sea una bella inspiración.
Buen domingo y un abrazo.
Es sólo fruto de la inspiración, Elda.
EliminarUN ABRAZO Y GRACIAS POR TU APORTE.
LINDA TARDE DE DOMINGO
FINA
ResponderEliminarHermosa personificación.
Y sí, tantos motivos para el desaliento, que es difícil esquivarlo.
Besos, poeta.
Todos, en mayor o menor medida, hemos vivido momentos de desaliento, pero lo importante es aprender a esquivarlo.
EliminarUn abrazo, Maria
Fina
Hola Fina
ResponderEliminarMagnifico poema! Siento el desaliento de las horas, sobre todo cuando pienso en mi pais lejano y sufrido.
Un gran abrazote!
A ese sentimiento le llamo yo morriña. Querida Natali.
EliminarUn fuerte abrazo
Fina
melancolías, hojas del árbol de la nostalgia
ResponderEliminarsaludos
Sí, ese árbol que nos desvela de vez en cuando...
EliminarSaludo afectuoso, Omar
Fina
El desaliento tiene horas que navegan hacia la tristeza.
ResponderEliminarUn abrazo
Ambos se encuentran siempre...
EliminarUn abrazo, José Manuel
Fina
Hola Fina, rodar y volar no actualiza las entradas, ha quedado atascado, ahora estoy publicando en este otro blog.
ResponderEliminarhttps://factoriapoetica.blogspot.com.es/
Gracias Fina, un abrazo.
Acabo de hacerme seguidora de él
EliminarBesos
COMO HIELO...!
ResponderEliminarABRAZOS
Contundente...!
ResponderEliminarAbrazo, ReltiH.
Fina
Con retraso mi querida Finita pero por aqui llego dedes tu comentario en Lola.
ResponderEliminarEse desaliento viene y va, hace las horas amargas, pero es parte de la mezcla de la vida.
Muy profundas tus letras.
Un abrazo.
Ambar
Así es, Ámbar, la vida nos regala de todo un poco, siempre.
EliminarUn abrazo
Fina
El desaliento forma parte de la vida, aunque no nos guste.
ResponderEliminarHola querida Fina, bellísimo poema, me ha encantado, felicidades poeta.
Un fuerte abrazo para ti.
Lola.
Gracias por tus elogios, Lola. Y...sí, no todo es de color de rosa, en este viaje nuestro.
EliminarUn abrazo
Fina
Un bello poema y muy oportuno Fina, vivimos tiempos de desaliento sin duda.
ResponderEliminarPero nunca debemos quedarnos a contemplar a ese triste viajero sin hacer nada por remediar la situación. Hay que luchar siempre por lo que merece la pena.
Un fuerte abrazo
Bueno, tiempos duros han existido, existen y existirán, y desalientos individuales, también, Joaquín, pero, como tú muy bien dices, los pasos siempre hay que darlos hacia adelante.
EliminarUn abrazo y que tengas un fin de semana agradable.
Fina
Una vez tuve una seria y larga charla con ese señor de corbata gris y, tras muchas horas de escucharnos, convenimos separar nuestros caminos para siempre y no volver a vernos nunca más. Precioso poema, Fina. No podía ser de otra forma siendo tú la artífice.
ResponderEliminarUn abrazo grande. Feliz semana.
Eso deberíamos de hacerlo todos, qurida Rita. Lo que desprende mal rollo, alejarlo de nosotros sin dudarlo un momento.
EliminarQue tengas linda semana. Un abrazo
Fina
¿Hacia adónde caminamos?
ResponderEliminarBuena pregunta con opciones varias de respuesta...
EliminarBienvenido/a a mi rincón jfbmurcia.
Fina
las lágrimas las hacemos nuestras son marcas del recuerdo , del desaliento uuff duro , triste , algo incierto , pero muy bello , un abrazo desde mi brillo del mar
ResponderEliminarGracias por tu huella, querida Bea. Para ti, desde este rinconcito del mediterráneo, vuela un abrazo
EliminarFina
Me parece un texto de la vida rutinaria, sin vida en la que a veces nos movemos sin darnos cuenta. Lleva corbata.
ResponderEliminarFeliz martes todavía de mayo.
Sí,corbata gris, Beatriz. Pero...siempre existe un nuevo color para ponerse...
EliminarUn abrazo
Fina
Todos en algún momento de nuestras vidas nos hemos sentido cautivos de esa desazón, de esa angustia, de esa tristeza que no nos permite ver la luz, entonces lloramos, nos angustiamos hasta que logramos abrir la ventana de la vida y sentimos los rayos del sol.
ResponderEliminarMuy bello poema Fina.
Un gran abrazo.
Es asi, momentos de desaliento, en mayor o menor medida, los hemos conocido todos, pero lo vital es que se queden solo en eso, en momentos.
EliminarAbrazo, Taty
Fina
¡ Quién no ha experimentado alguna vez ese temible desaliento, ocasión en la que todo se torna opaco ! Pero por suerte, está también la esperanza,llena de luz, que, como contrapartida,devuelve el colorido a los sentimientos grises.
ResponderEliminarHermoso poema, apreciada Fina, con esas metáforas tan bien logradas.
Un abrazo argentino...y un envío adicional a tu correo.
Hasta cualquier momento.
Victoria
Hoa, querida Victoria:
EliminarPara mí es siempre un enorme placer esta comunicación virtual contigo, tus comentarios, siempre tan generosas, así que gracias por esos minutos que me regalas de tu tiempo.
Para tí, un abrazo de afecto vuela hacia tu querida Argentina.
Fina